Autorizan la cesión de la Torre del Olivar a la hermandad de Santa Ana

Autorizan la cesión de la Torre del Olivar a la hermandad de Santa Ana
Torre del Olivar de Dos Hermanas / L.M.
Torre del Olivar de Dos Hermanas / L.M.

La Torre del Olivar de Dos Hermanas, que ha sido restaurada y puesta en valor recientemente, será cedida en un corto periodo de tiempo a la hermandad de Santa Ana. Así se desprende del acuerdo adoptado este viernes en el seno de la Junta de Gobierno local del Ayuntamiento nazareno, presidida por el alcalde Francisco Toscano, en la que se ha aprobado la cesión temporal y gratuita del uso de la finca a esta corporación.

Tal y como ya había anunciado el Gobierno municipal tras la finalización de las obras de restauración de la torre, el inmueble se cederá a la hermandad de Santa Ana, que tiene precisamente su capilla justo a unos pocos metros de distancia. La torre en sí podría servir de espacio expositivo para la hermandad en un lugar emblemático del centro del municipio, frente a su propio templo donde se le rinde culto a la que es patrona de Dos Hermanas.

Según ha detallado el portavoz municipal, Agustín Morón, ahora será la delegación de Ordenación del Territorio, que dirige la socialista Ana Conde, la encargada de «formalizar» el documento de cesión por un periodo de 30 años. De esta forma, la entrega de llaves definitiva podría producirse «a corto plazo», aunque no se ha concretado la fecha, ya que presumiblemente el asunto tendrá que pasar también por el Pleno municipal.

Morón ha descartado que, por el momento, esté previsto un acto público para escenificar la entrega del edificio a la hermandad de Santa Ana. Así las cosas, siguiendo lo que marca el Reglamento de Bienes de Entidades Locales de Andalucía para este tipo de cesiones, se ha «reconocido el interés público y social de la actividad de la hermandad y de las que va a desarrollar en la finca, que redundarán en la ciudadanía».

En el acuerdo de cesión se contempla además la obligatoriedad por parte de la hermandad de dar uso al inmueble en los términos recogidos en el mismo, sin posibilidad de «ser usado para otro fin, ya que si fuera así se extinguiría el acuerdo», según ha explicado Morón. La corporación concesionaria deberá hacerse cargo también del mantenimiento del edificio, excepto de la fachada de la torre, que correrá a cargo del Ayuntamiento. La hermandad sufragará los gastos de suministros, como luz y agua, además de otras tasas, y tendrá que tener un seguro de responsabilidad civil en todas sus instalaciones.

DH-Magazine

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